No es la escena de una superproducción de desastres al estilo de Hollywood, el sábado 20 de marzo del presente año, China despertó no con los modestos rayos de sol... fue mas bien recibido por un cielo completamente naranja, aun mas desconcertante es que era una tormenta de arena, originada por los desiertos al norte del país, siendo de preocupación no solamente por la población del gigante asiático, es también una advertencia a nuestra conciencia sobre la explotación de los recursos naturales en nuestro planeta, las razones son evidentes:
Los cada vez mayores desiertos del país ahora cubren un tercio del país debido al exceso de pastoreo, deforestación, crecimiento urbano y sequía. Las arenas cambiantes han generado un fuerte aumento de las tormentas de arena, las cuales pueden llegar a viajar hasta el oeste de Estados Unidos.
La Academia China de las Ciencias estimó que el número de tormentas de arena ha aumentado seis veces en los últimos 50 años, hasta llegar a dos docenas al año.
La última tormenta de arena afectó también las regiones de Xinjiang, el interior de Mongolia y las provincias de Shanxi, Shaanxi y Hebei.
Esperemos tomar conciencia sobre este acontecimiento, no solamente este efecto sobre el comportamiento del clima hemos visto este año, sin pasar por desapercibido el duro invierno que están enfrentando en algunos países como Estados Unidos y Europa, al mismo tiempo el intenso calor en Sur América. Aunque no puedo decir lo mismo de los sismos en Haiti y Chile.También debemos recordar que este sábado es... "La Hora del Planeta", que iniciara a las 20:30 horas (según el horario de cada país), debemos apagar la luz por un periodo de 1 hora en nuestros hogares. ¡Formen parte del movimiento por nuestro planeta!.
Vía | etoday
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